Resultados. Todos deseamos verlos de forma inmediata, pero
si aplicamos un poco de paciencia podemos evitar los métodos que requieran
cirugía y lograr bajar esa panza. Todo esto radica en activarnos y cuidar
nuestra alimentación.
1.- Integra en tu dieta diaria frutas y verduras. Aparte de
su delicioso sabor, nos ayudan a librarnos de las toxinas que se acumulan en el
cuerpo.
2.- Bebe al menos dos litros de agua diarios y evita los
refrescos, incluso los dietéticos, pues hinchan nuestro estómago.
3.- Al menos una vez a la semana incluye fibra. Avena,
granola, panes integrales, todo ello ayudarán al funcionamiento del sistema
digestivo.
4.- Haz comidas con más frecuencia, pero en menor cantidad.
Recuerda que debe ser comida saludable, evita los dulces, frituras y alimentos
grasosos.
5.- Hay muchas opciones para agregar actividad física en
nuestra semana. Practicar deportes, gimnasia, patinar, andar en bicicleta o
hacer caminatas en cerros o en parques, por nombrar unos ejemplos. Lleva tu
propio paso y lo más importante: ¡Diviértete!
No hay comentarios:
Publicar un comentario